27 Nov Dormitorio principal sutil y sobrio

Parte de un proyecto más amplio, en el que también diseñamos el salón-comedor entre otras piezas, planteamos este dormitorio sobrio e intemporal con algunos elementos orientales, como un espacio fundamentalmente destinado al descanso y relajación.

Líneas horizontales, colores amables y naturales con predominio de tostados oscuros, anaranjados y crudos… materiales nobles… en definitiva, coordinación sin notas estridentes. Una base neutra como punto de partida que se irá completando con detalles personales, recuerdos de viajes y piezas seleccionadas con cariño.

Optamos por un mobiliario de roble en color tostado oscuro muy sobrio. El cabecero, corrido con colchón sobre bancada, potencia las líneas horizontales que se reafirman en el jaspeado del tejido con el que confeccionamos los cojines.

En la pared elegimos la sensación textil natural del papel Shinok de Casamance , en sutil contraste con las espectaculares (pero sencillas) luminarias de aspecto oriental de cobre rosado Nón Lá de Bover.

El tono cobre anaranjado de los cojines  y  las lámparas actúa como contrapunto a la gama de tonos crudos predominante en la ropa de cama, paredes y suelo.

Para completar el conjunto nos inspiramos en el soporte de las lámparas y diseñamos y construimos una ligera banqueta en acero lacado, roble teñido y el mismo textil de los cojines.